Me inicio en el mundo del folklore a los 19 años, gracias a la “insistencia” de un compañero de clase en el Instituto. Este compañero, Toni Morán, (creador del baile Jota Piornalega) era componente de la Asociación de folklore “El Redoble” de Cáceres y siempre, al salir de las clases, me pedía que le acompañara a los ensayos, hasta que fui una vez…

¡y ya no he dejado el folklore!

       Esa fue mi primera escuela de folklore…después, han venido muchas horas de ensayo, muchos viajes, muchas actuaciones, muchos Festivales, muchos intercambios, muchos momentos inolvidables y, sobre todo, ¡incalculables amigos!

       Al cabo de los años, empecé a compaginar mi labor como componente de grupo de folklore, con la enseñanza de los bailes a otros grupos que empezaban en ese momento o que necesitaban una ayuda para relanzarse.

       De esta manera, comencé mi labor educativa en grupos como “El Despertar” de Cedillo, “Sopetrán” de Almoharín, “Las Llares” de Torreorgaz,” o “Ntra. Sra. del Salor” de Torrequemada.

       También colaboré en grupos de Membrío, Garrovillas de Alconetar, Alcuéscar, La Zarza, Montánchez, Zarza de Montánchez o Torrecillas de la Tiesa.

       Hoy en día, sigo la labor educativa con “El Almirez” de Torremocha, “Alfeizar” de Santa Ana, “La Lonja” de Valdefuentes, “La Encinilla” de Torre de Santa María , “Virgen de la Soledad” de Malpartida de Cáceres y puntualmente, el grupo «Las Gramas » de Mata de Alcántara.

       A parte de la labor docente, también he colaborado y sigo colaborando como bailarín o como componente de rondalla en varios grupos de la geografía extremeña, cuando lo han necesitado y me lo han solicitado.